Fernando Sabido Sánchez






ESTE POEMA NO ES UN GRITO PORQUE NO NOS ESCUCHAN,

ES UNA MALDICIÓN

(A las mujeres y hombres del mundo que desde el 15-M están

despertando las conciencias de un largo letargo)


Maldigo a los países del euro, del dólar y la usura culpables de una clase

media rémoras de los desechos que desprenden sus vísceras


Maldigo a sanguinarios dictadores que mantienen sus campos

improductivos pero los siembran de minas antipersonales


Maldigo a príncipes, emires, jeques y señores de la guerra que cultivan

petróleo y opio para enriquecer a yanquis y judíos conversos


Maldigo a los que beben la orina de los imperialistas en las copas

del oro expoliado al precio de tres negros muertos la onza


Maldigo a cobardes parricidas que defienden sus fronteras con la sangre de

niños soldados


Maldigo a virreyes, castas y camarillas que se enriquecen con la cocaína

mientras encarcelan pensamientos e ideas


Maldigo a los gobiernos que se llaman demócratas y equilibran las balanzas

de pago vendiendo armas a sanguinarios y dementes dictadores


Maldigo a los hipócritas abanderados de una herencia noble y centenaria

que reniegan de sus ancestros y los ignoran enterrados en fosas comunes

de cementerios y carreteras


Maldigo a los políticos que se proclaman solidarios pero no reconocen al

Estado palestino cuando gobiernan


Maldigo a los mercaderes que fabrican tanques y aviones para las guerras

con el acero que recorre sus venas en estado sólido


Maldigo a los reyes y a los príncipes investidos en la edad del bronce que

siguen reinando en el siglo XXI dicen que por el color azul de su sangre


Maldigo a los corruptos políticos que enarbolan banderas mientras llenan

sus bolsillos a costa del pueblo


Maldigo a los papas y obispos que en el nombre de un dios inventado

pretenden imponernos una moral blindada entre dogmas y fe porque no

tienen ningún argumento


Maldigo a los jueces que dictan sentencia según sea zurda o diestra la

mano de aquel que les ha designado para puesto tan productivo


Maldigo a los xenófobos, fascistas confesos podridos por el odio


Maldigo a los banqueros del mundo codiciosos vampiros que chupan la

sangre de los ciudadanos mientras le besan el culo corruptos políticos


Maldigo a la sociedad de consumo que a cambio de llenarse el estómago

permite que le tapen el oído, la boca, la nariz y los ojos


Y bendigo a los que con la razón y la palabra remueven las conciencias

porque de ellos será el futuro.


http://fernando-sabido.blogspot.com/

6 comentarios:

  1. Muy bueno, bien hecho por maldecir a todas esas viboras que no pueden denominarse humanos.

    ResponderEliminar
  2. Muy bueno,me ha gustado mucho,felicidades a quien lo haya escrito y ojala se ahogaran todos estos malnacidos con su propio bomito

    ResponderEliminar
  3. No me gustan los panfletos populistas... no te conozco, pero por lo leido aquí no creo que hayas maldecido en la cara a nadie en tu vida... lo siento por ti

    ResponderEliminar
  4. Muy bueno y por desgracia muy real.

    ResponderEliminar
  5. Jero, he puesto que los comentarios sean libres y por lo tanto dan lugar a comentarios negativos, pero no por ello insultantes. Me gustaría que en este movimiento estemos juntos y no echándonos piedras contra el propio tejado con insultos baratos. Pido un respeto a los participantes de este blog.

    Julia

    ResponderEliminar
  6. no maldigo a nadie, pues no soy quien, soy argentina, eres contacto mio en face, en muchas cosas estoy totalmente de acuerdo, hemos pasado en nuestro país, muchas cosas, el pueblo abatido por la dictadura y nadie dijo nada, desaparecidos y nadie de lejos dijo nada, hemos padecido desagios bancos en quierbra y le mundo seguía andando. Hemos sacaso al pueblo a la calle solos con ollas sartenes cuando nos robaban y solo lo vieron por t.v.
    No maldigo a nadie pues maldecir no es bueno pues maldecir es quizás y sin querer ofender - soberbio- Estoy con ustedes, llevo parte de sangre gallega, pero hablando con hidalguía quizás se podrán conseguir muchas más cosas que maldiciendo solo por el hecho de creer que de esa forma somos mejores.
    Todo mi afecto al pueblo español, que la unión haga la fuerza, con el don de la palabra sin maldiciones. Un gusto!

    ResponderEliminar